martes, 20 de octubre de 2009

VAMOS A LA HUELGA

Hola a todxs. El tiempor que llevo sin publicar se debe en gran medida a la ausencia de tiempo que deriva de mis múltiples obligaciones. Pero por una vez, esas obligaciones pueden esperar un rato y ceder un corto espacio a una vía de escape para la indignación de la que soy víctima en estos momentos.

Se me ha vuelto a ocurrir la nefasta idea de poner la televisión. Estaban emitiendo un debate al hilo de las palabras del presidente de la patronal gerardo díaz-ferrán (no es nombre de persona, no va con mayúsculas, perdona, querido idioma). Todo el mundo parece haberse posicionado a favor de la ceoe en un asunto tan vital como la reforma laboral, y ya no lo aguanto más. Resulta que la solución a la crisis pasa por hacer caso a aquellos que la provocaron.

Y no pronuncio estas palabras sin conocimiento de causa. Los que ahora se autoproclaman gurús de la solución al problema mundial (aznar y pupilos suyos como gonzález pons, que también ha hablado por televisión), hablan de la necesidad de la búsqueda de soluciones a la recesión a partir del apoyo a la iniciativa privada. La iniciativa privada esta muy bien, por todo aquello de la autodeterminación individual, etc. Pero la inofensiva iniciativa privada y responsable que defiende el anarquismo poco tiene que ver con el menoscabo que se ha hecho de este término por parte de los acrroñeros capitalistas.

La iniciativa privada (y me estoy refiriendo por ésta a la que propugna el modelo de marcado, que más que iniciativo es fomento de los intereses particulares a partir de la indefensión produucida los intereses de los más débiles) es la misma, señores, que nos ha llevado a la crisis. Hablan de un fracaso del modelo de la tercera vía (no lo dudo, cualquier modelo que se fundamente en la represión de las fuerzas estatales es un fracaso para mí), pero sin duda lo que ha fracasado más estrepitosamente es es llamado "laissez faire".

Y voy a explicar por qué. Todo postulado capitalista se fundamenta en su personalismo y en su no universalidad. Es decir, permitir el "laissez faire" a unos, implica atar de pies y manos a otros, ya sean los trabajadores por poner un caso especialmente relevante.

Pues bien, aún atados de pies y manos, los trabajadores severamnete desprotegidos por las facilidades que concede el capitalismo al despido y que incluso impide desarrollar una actividad laboral productiva y efectiva, tiene que soportar que se diga que existe una cerrazón en torno a sus intereses, que no son permeables con respecto a los intereses de otros actores en el proceso económico.

Cerrazón, impermeabilidad a sus intereses. Eso es darle arbitrariamente y falazmente la vuelta a la tortilla. Porque los que no atienden a reivindicaciones sindicales son los empresarios. Proque son ellos mismos los que se pliegan indefectiblemente a sus intereses particulares, siendo capaces de sacrificar a toda una plantillade trabajadores, pero, al mismo tiempo, incapaces de recortar sus beneficios para mantener a los trabajadores que generan tales ingresos.

Es lamentable que se tenga que aguantar por parte de los trabajadores que encima te echen las culpas de los problemas que ellos mismos han generado y que, con millones de personas sin empleo a causa de la voluntad capciosa de empresarios y entidades bancarias, tengamos que soportar que nos digan que no atendemos a razones.

Ya está bien de bajarse los pantalones. No puede ser que un tío cuya empresa está en plena caída libre y planteando ERE's (me refiero al desgraciado del presidente de la ceoe, díaz ferrán y a su empresa Marsans), diga que existe una cerrazón sindical. Pues aun a pesar de dicha cerrazón sigue sin existir ningún pudor por parte de Estado y empresarios para firmar expedientes de regulación de empleo. Es como si yo hincho a palos a un atleta y le acuso de que no rinde por las heridas que tiene (sin hacerme en ningún caso cargo de dichas heridas).

¿Creen que hay cerrazón sindical? Pues les vamos a dar razones para que la haya. ¡TODOS A LA HUELGA!. Sin miedo.

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