ESCARNIO CONTRA LA ACRACIA

Precisamente ayer, día 1 de agosto de 2009 -aproximadamente dos semanas después de la efeméride del 19 de Julio de 1936- el frentepopulismo y la incoherencia invadieron nuestra tierra alicantina encarnada en la efigie del grupo Ska-p.
Una “agrupación musical” que se declara anarquista y antiestatista, empero estos posicionamientos axiológico poseen un significado laxo para la mayoría de la sociedad, y no porque su magnánima semántica no haya sido aprehendida por el conjunto de la clase obrera, sino más bien porque estos grupúsculos de cucarachas -cuyas celebraciones recuerdan si bien al averno de Dante, donde preponderan seres andrógenos subsumidos en la ebriedad- han mutado tan excelso significado en verborrea nostálgica o en su defecto se ha convertido en el augusto pretexto de la drogodependencia juvenil.
Efectivamente estos grupos actúan como verdaderos señuelos del Estado-Capital, funcionan como sucedáneos exclusivos y novedosos del anarquismo, siempre a tenor de la moda, de las exigencias socio-económicas de las multinacionales. Esta presumible “alternativa” a la vesánica y tenaz lid ácrata no responde más que a la necesidad de crear acémilas juveniles, hombres de conciencia estólida, que subsista gracias al furor de una dosis. ¡Por supuesto que este hervidero de culebras no suponen una alternativa a la Idea! Por muy anticapitalistas, antiestatistas, anticatólicos y demás superchería habida y por haber, estos individuos no sólo no militan a fuer de esas ideas sino que existen para seguir avivando el espectáculo circense que la sociedad de consumo anhela: ¡Revolución, Libertad! Pero la nuestra obviamente…
Ante todo ese alud de actitudes que han anatemizado la Idea debemos ser autocríticos y preguntarnos: ¿Libertad? ¿Revolución? ¿Para qué?¿Por qué? Ska-p promulga la libertad (condicionada y condicional), sus soflamas y parlamentos enarbolan ese arcano eléctrico y mágico que los hombres a lo largo de la historia han perseguido; ¿pero acaso ellos comprenden el significado intrínseco de la libertad? Esta misma actitud “militante” es la que convierte a nuestros jóvenes en seres indecisos, inconsecuentes, en revolucionarios de pacotilla (de lo que se come se cría, pero de lo que se escucha también)… Nos encontramos pues con la trivialización de la vida, de la imperiosa necesidad de derrocar al estado y a la religión; estamos pues frente a la mercantilización de los valores, su exposición en escaparates y su valía moral fluctuando en función de las necesidades del mercado. Desde aquí entonamos la más bella de las arengas para la acracia: ¡SOLIDARIDAD, IGUALDAD, LIBERTAD, CULTURA Y ACCIÓN!

Después de 100 años de militancia, de vidas enteras volcadas en la cultura, en el tenaz avance a favor de la ciencia de los hombres, de autocrítica y análisis, de lamentos y loores, de sembrar los campos y fábricas de nuestras Idea, de ofrecer a los hombres sin pan una ilusión por la que seguir viviendo, de hacer que la vida pueda ser increíblemente extraordinaria… Después de todas estas historias, de todos esos instantes dedicados a la revolución, y con la lucidez que la convivencia humana aporta podemos sentenciar con un racimo de responsabilidad: ¡ACABEMOS CON LAS HORDAS DE LA HIPOCRESÍA Y LA SIN RAZÓN!
Desde este preciso instante retamos a todos estos individuos que embotan nuestra idea, que llenan de ponzoña la sangre desbordante y generosa, la sangre de la excelencia humana, la sangre de todos esos hombres que han caídos embravecidos en la batalla, pugnando magnánimamente por un ideal grandioso y que ahora, abrigados en la Iberia materna, nos envían , con sus destellos de luz tranquila y remota, el mensaje de la idea eterna que dice a todos sus hijos: paz en la tierra sobre las ruinas de la autoridad


¡SKA-P: EL NEGOCIO DE VENDER ANARQUÍA!