jueves, 30 de abril de 2009

SINDICATOS AMARILLOS


Hola a todxs. ¿Sabéis qué día es mañana? ¿No? Pues deberíais. Mañana se cumplirán (a ver, cálculo mental... estoy un tanto espesillo hoy, pero creo que ya lo tengo) un huevo de años desde la matanza de Chicago (en 1886, eso sí que me lo sé). Pues bien, mañana hablaré de tan especial fecha para los sindicatos DEFENSORES de los intereses laborales de los trabajadores, y para estos mismos.

Pero hoy, voy a hacer referencia a ciertos sindicatos que en ocasiones, no cumplen tal fin. Son los sindicatos amarillos. El origen del término está en la Francia de finales del XIX y principios del XX. Hace referencia a un grupo ''sindical'' minero, fundado en base a intereses empresariales y que se oponía a los movimientos huelguistas de sindicatos socialistas y anarquistas. Este grupo sindical sindical, no ofrecía ningún reparo al hecho de actuar como piquete e incluso como policías, para aplastar las reivindicaciones de sus hermanos mineros.

Desafortunadamente, la existencia de grupos ''sindicales'' que atenten contra la defensa de intereses laborales más amplios por parte de otros grupos, es un hecho que ha tenido una notable continuidad histórica. No hablaré de la Guerra Civil, ni de sindicatos comunistas exterminando a los libertarios de la Barcelona del 36-37. No hablaré de aquéllos que prefirieron seguir las directrices de un estado totalitario, aun a costa de masacrar a sus compañeros. No hace falta irse tan lejos en el tiempo, aunque la base del problema actual es histórica.

Concretamente, voy a retroceder unas semanas atrás. Me encontraba en estación de tren de Atocha, cuando me asaltaron unos individuos lanzando pasquines y proclamando el fin del capitalismo y la revolución social. Entonces vi sus siglas. Capitalistas Gilipollas y Terratenientes (CGT). Sí, la puta CGT. Eso he dicho, la puta CGT. Cogí la mierda del suelo (los pasquines) y tiré a la papelera todos menos uno que arrugué con todas mis fuerzas. Cuando la ira me abandonó, pensé: ''bueno, vamos a leerlo, que tienen derecho a expresarse''. Craso error por mi parte. En el folleto, esta panda de ineptos proclamaba la revolución social y el fin de la burocracia sindical. ¡La Revolución Social! (ahora con mayúsculas), aquélla misma de la que están ''orgullosamente escindidos''(en sus propias palabras) los muy gilipollas. El fin de la burocracia sindical y del capitalismo. Ríome de vuesas mercedes. No es que sea un erudito conocedor del cuerpo procedimental del sindicalismo obrero anarquista (un niñato de 19 años, que es uno), pero creo que no es muy correcto criticar la burocracia sindical, cuando te estás presentando a elecciones sindicales promovidas por ellos mismos. Es como cuando la hoya de grillos estalinista del PCE presente en IU, critica el sistema de partidos.

Pero es que voy más allá. No puedes criticar el capitalismo cuando el mayor ascenso en cuanto a militancia de tu sindicato, ha venido a raíz de las posibilidades económicas y propagandísticas que has aprovechado de tal sistema. O es que acaso, vostrxs, queridxs libertarixs, ¿habías oído hablar de la acción cegetista fuera del período de la transición?

Me parece de puta madre que quieran ser siervos del sistema que critican, pero no bajo nuestra bandera. No se puede lograr la Revolución Social boicoteando y silenciando al sindicato que empezó a enarbolar la rojinegra en Iberia.

Quizá me demanden por esto, ojalá lo hagan. Pero contra la verdad, no hay demandas que valgan. Eso sí, soy un caballero ante todo y me alegro de que no vayan a encontrar dificultades a la hora de ir a demandarme. Lo tendrán tan fácil como decírselo a uno de sus no pocos policías sindicados.

¿Policías? ¿Sindicados? ¿No os sonará esto por casualidad? ¿No os recuerda a cierto grupo antihuelguista de la Francia de hace un siglo? Amarillo el sindicato es, amarillo es...

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